El V Encuentro de los Mares cerró cuatro días de actividades con un mensaje de esperanza de la nieta del oceanógrafo que calificó de “terrible” la pérdida de más de 50% del capital natural azul
Alexandra Cousteau, activista medioambiental, submarinista y nieta del comandante Jacques-Ives Cousteau, fue la encargada ayer, en Costa Adeje, de cerrar las ponencias del V Encuentro de Los Mares, que organiza Vocento Gastronomía en colaboración con el Cabildo de Tenerife. Cousteau quiso lanzar un mensaje de optimismo a los científicos, empresarios, periodistas, cocineros, etcétera que se dieron cita en el hotel Sábila Iberostar: “Aún queda tiempo para salvar los océanos”.
La activista medioambiental tuvo palabras de recuerdo en varias ocasiones para su abuelo y para su padre en su disertación. Señaló que cuando su abuelo comenzó a investigar el mundo de los mares la vida era muy diferente, había mucha vida y desde entonces se ha perdido más del 50% del capital natural azul. Calificó esta situación de “terrible” aunque lanzó un mensaje esperanzador para salvar los océanos.
Cousteau añadió en ese sentido que hoy los mensajes de conservar y mantener los océanos no han calado entre la ciudadanía porque se ha seguido con la destrucción de los mares. “Mi hija me dice que cuando sea mayor quiere seguir mis pasos. Y tengo miedo cuando le hablo de lugares que han desaparecido, como piscinas naturales cubiertas que ya no están. Es como visitar zonas fantasmagóricas”.
Un día hablé con Carlos Duarte, catedrático de Ciencias Marinas de la Universidad Rey Abdullah de Ciencia y Tecnología de Arabia Saudita, que también ha participado en estas jornadas, y me informó que tenía una hoja de ruta para poder reconstruir la vida de los océanos. Entre otros objetivos hay que cambiar el lenguaje y hablar de reconstruir, de regenerar y de revertir todo el daño causado durante muchos años por protecciones insuficientes”, afirmó Alexandra.
Cousteau cifró en un 40% la gente que ha perdido la esperanza de tener un planeta mejor y no quiere tener hijos. Esta situación es terrible. Hay que cambiar esta narrativa porque todavía quedan ventanas pequeñas porque “un océano sin ballenas no es un océano, y un bosque sin elefantes no es un bosque”. Destacó que para revertir esta situación es necesario apoyarnos en el mundo de la ciencia y la naturaleza y para llevarlo a cabo es necesaria la involucración de todos los ámbitos relacionados con el mar y sus recursos. Aquí tuvo palabras para los cocineros y los restauradores, en el sentido de seguir apostando por la sostenibilidad y haciendo un uso responsables de los recursos marinos. Recordó que cuando era pequeña y practicaba el esquí le decían que no debía mirar a los árboles, sino a la pendiente, y de esta manera evitaría chocar y que lo que nos hace falta es contar con una hoja de ruta para hacer ese cambio”.
“Mi esperanza -dijo- es que cuando mi hija, que nació en 2011, diga que quiere ayudar a salvar los océanos ya no sea necesario”. Tras esta alusión a su hija defendió la denominada “economía azul” y atribuir un valor a la naturaleza porque si no vamos a perder el medio ambiente.
Turismo azul. El turismo azul también fue uno de los temas que se debatió en el Encuentro de los Mares, que reunió a David Pérez, de Turismo de Tenerife; Higinio Guerra, de la Asociación de Conservación de Cetáceos de Tenerife; Eduardo Serrano, director de la consultoría Destinos Turísticos, Hoteles y Empresas de Restauración de España y Latinoamérica, y Federico Cardona, Coastal Health Strategy Manager EMEA Iberostar.
David Pérez señaló la importancia de la actividad del avistamiento de cetáceos que deja anualmente unos 30 millones de euros en Tenerife y que lo disfrutan unas 700.000 personas al año y que en estos momentos por ejemplo no se pueden dar más licencias hasta que lo decida el ministerio.
Pérez si señaló al ser preguntado sobre qué medida habría que implementar para un mejor funcionamiento: “Hay un exceso de regulación, pero hacen falta más inspectores que vigilen el cumplimiento de las normativas”. Serrano ha calificado al turista de “hedonista y disfrutón, por tanto depredador y destructor” y señaló que pasa 170 noches año en hoteles y que cumple con las recomendaciones sobre el uso de las toallas pero que al final no sirven de nada: al día siguiente el servicio de habitaciones las retira para lavar”.
Benjamín Lana: “No vamos a tener miedo a tratar todos los temas”. Benjamín Lana, director general de Vocento Gastronomía, señaló ayer que este V Encuentro de los Mares ha sido “la mejor llevado a cabo hasta el momento” y “no vamos a tener miedo a abordar todos los temas” que estén relacionados con el mundo del mar y su conservación y se convertirá en un espacio de debate y reflexión. | José L. Conde