Los galardones anuales de la organización, que preside Antonio de la Cruz, se entregaron en el Casino con una mención especial a El Gusto por el Vino
La Academia de Gastronomía de Santa Cruz de Tenerife, que preside Antonio de la Cruz Veguero, entregó en la noche del jueves, en el Casino de la capital, sus premios anuales, que recayeron en el restaurante San Sebastián 57, del chef Alberto González Margallo y el jefe de sala Carlos Ferrer Cabo.
También hubo una mención especial para la empresa El Gusto por el Vino, de Antonio Armas. La entrega de estos galardones, que estaba prevista para el mes de septiembre del año pasado, había sido aplazada hasta hora debido a las restricciones impuestas por la pandemia de la COVID.
En el acto estuvieron presentes, además De la Cruz, el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez; el presidente de Cajasiete, Fernando Berge; el viceconsejero del Sector Primario del Gobierno de Canarias, Álvaro de la Bárcena Argany, y la nueva presidenta de la Academia de Gastronomía de Las Palmas, Inmaculada Roca.
De la Cruz destacó del restaurante San Sebastián 57, ubicado en la calle del mismo nombre en Santa Cruz de Tenerife, muy cerca del mercado Nuestra Señora de África, el buen trabajo en las cocinas de Alberto González, nacido en Cantabria, aunque lleva años en la isla, y su implicación con el buen producto con especial compromiso con el género de las islas.
También reseñó la buena sintonía existente entre el equipo de cocina y el de sala, comandado por Carlos Ferrer, que crean una experiencia gastronómica de primer nivel.
González Margallo, en su turno de agradecimiento, señaló que no sabía si su restaurante “era el mejor o si, por el contrario, era el que tenía mejores clientes”.
Por otro lado, la directiva de la academia estimó, en estos tiempos de pandemia, entregar un Mención Especial a la empresa El Gusto por el Vino, de Toño Armas, por la labor desarrollada en la promoción de los vinos canarios de calidad y su destaca colaboración con el sector de la restauración en estos tiempos tan difíciles.
De la Cruz destacó el compromiso que la Academia de Gastronomía de Tenerife mantiene con chefs, bodegueros, y, como no puede ser de otra manera, con el sector primario para trabajar en pro de la gastronomía de las islas y más especialmente en estos momentos difíciles por la pandemia del coronavirus.
Por último, cerró el acto al alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, quien recordó que la capital tinerfeña debería encontrarse ya en el nivel 1 de alerta por la pandemia, si se atienen a los datos de vacunación y de contagios, y espera que la próxima semana cambie de categoría.
El premio consistió en un diploma y en una escultura, de Francisco Moreno, quien ganó un concurso de la Facultad de Bellas Artes de La Laguna en colaboración con la Academia. | José L. Conde