Boutique Relieve: La transformación de un obrador

Alfredo y Alicia Marrero, en el obrador de chocolate | Foto: José L. Conde
Alfredo y Alicia Marrero, en el obrador de chocolate | Foto: José L. Conde

Alfredo y Alicia Marrero cuentan con el primer ‘Bean to Bar’ de Canarias, una máquina para el tratamiento del chocolate

Puerto de la Cruz se abre a la gastronomía. Las calles peatonales del casco viejo y anexas van recuperando antiguas casonas para crear nuevos espacios de restauración y además de calidad. El último caso ha sido la apertura de la Boutique Relieve, en la calle Luis de la Cruz, donde los hermanos Alfredo y Alicia Marrero, han dado un paso al frente al proyecto del obrador inicial de sus padres en el municipio de Los Realejos.

Boutique Relieve sin duda será el negocio de bandera de las cinco tiendas que actualmente tienen en el Norte de Tenerife (El Toscal, La Montañeta, La Vera, La Orotava y ahora en el casco del Puerto de la Cruz). El nuevo proyecto empresarial de ambos hermanos comenzó ya en 2016 cuando Alfredo entró a dirigir el área de producción y las líneas creativas de Relieve después de formarse en Barcelona y realizar prácticas con referentes nacionales de pastelería como Oriol Balaguer, el Dolç par Yann Duytche o Foix de Sarriá, y dio un giro de 360º al obrador sin perder la esencia de la empresa que no es otra que la calidad del producto.

El obrador del chocolate donde se procesan las habas de cacao | Foto: Sergio Méndez
El obrador del chocolate donde se procesan las habas de cacao | Foto: Sergio Méndez

El nuevo local portuense aglutina este nuevo ideario empresarial. Ubicado en una casona del siglo XVIII, Casa Topham, que dicen que fue la tercera casa construida en el municipio, albergó desde el principio ultramarinos, y fue almacén de café y cacao, por su proximidad con el puerto. El interior es espacioso, con colores suaves, confortable con toques de madera y mantiene una terraza en la fachada principal.

Las novedades de este establecimiento se centran en el primer ‘Bean to Bar’, que hay en Canarias, que permite un tratamiento del chocolate desde el haba, y una moderna y vanguardista cafetera ModBar, que sirve los cafés como si se tratara de un grifo de cerveza. Con respecto al ‘Bean to Bar’ es un nuevo tratamiento del chocolate que respeta la pureza del producto con una técnica muy poco conocida que nace en la Baja California con México y que reivindica que no se modifique su sabor en origen, su pureza y sus matices.

También es una apuesta por la sostenibilidad y el producto natural, que casa con la filosofía de la boutique Relieve, al aprovechar la esencia del producto sin necesidad de un proceso de transformación más industrial y costoso. Actualmente cuentan con variedades de Madagascar, México, Oceanía, Nicaragua, Cuba e incluso de la India. La terminación del chocolate se puede disfrutar en la tienda o adquirir en tabletas, con un diseño exclusivo.

Alfredo Marrero | Foto: Sergio Méndez
Alfredo Marrero | Foto: Sergio Méndez

La otra de las novedades es la máquina ModBar que sirven los cafés como si se tratara de un grifo de cerveza: Siempre sale en las mismas proporciones y se evita el azar de si sale más fuerte, más flojo o con más o menos amargor. Hay que decir que el café no es industrial sino tostado en una empresa de La Laguna y personalizado con granos de Colombia, Etiopía, Nicaragua y Brasil.

Alicia Marrero, directora de Boutique Relieve, señala que la empresa está viviendo un cambio de tendencia. “Lo hemos perseguido en profundidad desde la formación del personal a un giro hacia la modernidad, la innovación y la sofisticación, pero sin cambiar un ápice la visión y el peso que le damos a la materia prima que siempre nos ha identificado”.

Buen café y buen chocolate que se puede acompañar con la ya conocida pastelería moderna y tradicional del obrador de Relieve y ahora también quieren trabajar más con hogazas de pan de masa madre que cada día son más demandadas entre el público que busca productos saludables.

Relieve LAB es la escuela de formación, que inauguró el pastelero catalán Oriol Balaguer, y que tendrá la doble vertiente de ofrecer cursos de repostería para profesionales y para público amateur que quiere aproximarse a las elaboraciones y técnicas que luego aplicará en su casa. | José L. Conde