La pizza napolitana, Patrimonio Inmaterial de la Humanidad

Porción de pizza | Foto: J.L.C.
Porción de pizza | Foto: J.L.C.

La tapa, un producto típicamente español, aspira a que la Unesco la reconozca también

La ciudad italiana de Nápoles estaba ayer de fiesta. El arte tradicional de los pizzaioli napolitanos, es decir, lanzar la masa al aire para luego pasarla de una mano a otra con la finalidad de oxigenarla, obtuvo el reconocimiento de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, declarado por la Unesco, en una reunión que tuvo lugar en la isla surcoreana de Jeju.

Aunque el origen de la pizza nunca ha estado claro si fue en Niza o en Nápoles, lo cierto es que estos últimos llevan ocho años trabajando y recogiendo firmas con el fin de lograr este reconocimiento, que hasta ahora lo habían obtenido la gastronomía de Michoacán, el kimchi, el pan de jengibre, la comida tradicional japonesa, el café turco, el lavash armenio, la comida mediterránea, el lentisco de Chíos y la gastronomía francesa.

La labor de los pizzaioli italianos se ha ido transmitiendo de generación en generación, aunque hay que reconocer que fuera de la ciudad italiana es más difícil encontrarla. Los ingredientes fundamentales para la elaboración de la pizza son la harina y el agua, que se va amasando con las propias manos y luego es lanzada al aire para pasarla de una mano a otra con el objetivo de oxigenarla. Antes de introducirla en el horno, se le añade  tomate, mozarella, aceite de oliva y albahaca, entre otros

Si bien hasta ahora esta tradición culinaria ha ido pasando de padres a hijos, ahora solo quedan en Nápoles unos 3.000 pizzaioli, por lo que se empezarán a realizar cursos para que este arte culinario no se pierda.

La tapa. La tapa, un producto típicamente español, aspira a que la Unesco la declare Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, gestiones que ya ha llevado a cabo el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, que dirige el también portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, en estrecha colaboración con la Real Academia de Gastronomía, que preside Rafael Ansón.

Esta versión culinaria, que en ocasiones ha sido comparada con la pizza, ha sido definida por Ansón como “el modelo más importante que España ha exportado dentro de la gastronomía, por encima incluso de la cocina creativa”. | J. L. C.