El experto sumiller Agustí Peris, que realizó una cata comentada en Altos de Trevejos (Vilaflor), destacó su grata sorpresa con los productos elaborados en la isla
“Los organismos que regulan el vino en España son unos incompetentes. Perdona que lo diga de esa manera. La administración está atada a una serie de factores y cuenta con malos asesores. Así que no vamos nada bien”.
Así se expresa Agustí Peris, sumiller del restaurante asador Extebarri, formado en la Universidad de Toulouse y con un amplio currículo por establecimientos del Grupo Martín Berasategui, Mugaritz, Guggenheim o Kunsal. Peris ha visitado recientemente Tenerife para participar en una cata de los vinos y espumosos de Altos de Trevejos, en el municipio de Vilaflor, bodega que dirige Enrique Alfonso.
Agustí Peris es claro y contundente a la hora de referirse a las Denominaciones de Origen del Vino en España, de las que señala que “son unos incompetentes” y que están atadas a numerosos factores que están perjudicando al mundo vinícola. Recuerda que las DO surgieron en los años 30 en Francia con el fin de proteger al sector y en respuesta a las revueltas, que en la zona de la Champaña llegaron a alcanzar la cifra de 200 muertos.
Sin embargo, afirma Peris, han pasado muchas cosas desde entonces y la primera crítica que hay que formular es que no ha sido actualizada; pero también hace suya la frase de que “lo vas haciendo peor, peor y cada vez peor. En un problema porque realmente no saben cómo hacerlo”.
Interrogado sobre si la gestión debería estar en manos de los agricultores indica que es un asunto complicado, como si empezamos a pensar cuál es el origen de la uva y del hombre… Los franceses son defensores de las Denominaciones de Origen, mientras que los americanos apoyan un mercado libre. Miguel Torres, de las bodegas que llevan su apellido y que conoce bien los vinos del todo el mundo, apuesta por más libertad. ¿Las restricciones van bien? “No lo sé. No es un tema fácil”, dice.
Peris valora los vinos que están elaborando en estos momentos en la isla de Tenerife. Concretamente, los de Altos de Trevejo, en uno de los municipios más altos de España, que han sido “una sorpresa total. Cuando voy a probar unos vinos, me preguntó varias cosas y de entrada me costó encuadrarlos geográficamente por la altitud. Pero sobre todo de Enrique Alfonso me gusta sus ganas de enfrentarse a un proyecto nuevo en un clima privilegiado”. | José L. Conde