Tenerife defiende la calidad ecológica y sostenible de la pesca

Ronqueo de un atún en la costa de Alcalá | Foto: José L. Conde
Ronqueo de un atún en la costa de Alcalá | Foto: José L. Conde

La Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca, que preside Javier Parrilla, participó en el II Encuentro de los Mares para explicar la singularidad de los túnidos que pasan por Canarias

La presentación de ‘Los túnidos de Tenerife, uno a uno’ tuvo lugar el pasado martes en la cita virtual II Encuentro de los Mares, que organiza la División de Gastronomía del Grupo Vocento, que preside Benjamín Lana.  Con esta segunda edición “hemos sentado en una misma mesa a los mejores científicos marinos, a técnicos y pescadores, y a los chefs que mejor trabajan el mar para que hablaran y acercaran posturas sabiendo que partían con visiones diversas. Y lo han hecho con un resultado excelente teniendo en cuenta cómo hemos tenido que reprogramar un congreso pensado para celebrarse off line”, señaló Lana.

El Cabildo de Tenerife, patrocinador del evento a través de su Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca y con las marcas Tenerife Gastro Experience y Pesca Artesanal, ha participado con la ponencia ‘Los túnidos de Tenerife, uno a uno’, en la que participó el consejero del ramo Javier Parrilla que ha impulsado durante este mandato la pesca artesanal.  Por otro lado, Agustín Espinosa y Katiusca González, biólogo experto en túnidos el primero y la gerente del Grupo de Acción Costera de Tenerife (ONG de gestión y comercialización apoyada por el Cabildo y presidida por el mismo consejero) la segunda, desarrollaron la ponencia.

La conferencia desarrolló la singularidad de los túnidos que se capturan en aguas de la isla, una pesca que tiene lugar durante todo el año gracias a que Tenerife, como apuntó Espinosa, “es lugar de paso de cinco especies, entre las que destacan el famoso atún rojo (Thunus thynnus), el patudo (Thunus obesus), el barrilote (Thunus alalunga), el rabil (Thunus albacares) y el bonito listado (Katsuwonus pelamis)”. La situación de Tenerife en pleno Atlántico y en la fría corriente de Canarias, ambas sin contaminación, y junto a la costa africana, no sólo facilitan una rica alimentación a los túnidos, sino que, explicó González, debido a la cercanía de los puertos, permite su llegada y comercialización en muy pocas horas. “En 24 horas nuestros túnidos están en el resto de Europa”, remató.

Tataky de lomo de atún con puré de anisados y pico de gallo, del chef Juan Carlos Clemente | Foto: José L. Conde
Tataky de lomo de atún con puré de anisados y pico de gallo, del chef Juan Carlos Clemente | Foto: José L. Conde

Dos claves que explican la creciente importancia de los túnidos canarios en el panorama global, a las que hay que sumar la captura completamente artesana, con anzuelo y uno a uno de los especímenes, ya que Canarias tiene prohibida cualquier otra arte para su pesca. Se trata, por tanto, de una pesquería sostenible, respetuosa con el medio ambiente y con una trazabilidad impecable. Y de altísima calidad organoléptica.

Con una programación que contó con 27 ponentes de 11 países, el II Encuentro de los Mares presentó a científicos como Alexandra Cousteau, nieta de Jacques Cousteau (“Tenemos 10 años muy importantes por delante si queremos salvar los océanos, y lo primero es consumir pescado con trazabilidad, porque todos somos parte del cambio”); Carlos Duarte, biólogo (“Estamos en una situación límite); Guillermo Aldama, cardiólogo (“La dieta atlántica alarga la vida y consumir pescado dos veces a la semana reduce la mortalidad cardiovascular un 30%); o Boris Worn, biólogo y ecologista marino (“Sólo con salvaguardar el 30% de los océanos y crear reservas pesqueras conseguiríamos salvarlos, porque la recuperación de una zona marítima se consigue en sólo 20 años”).

En lo gastronómico, el chef Ángel León, del restaurante Aponiente, estimuló a todos los cocineros a incorporar en sus menús “nuevas especies, poniéndolas así en valor y restando presión sobre las 15 o 20 más demandadas y que merman los caladeros con más presión pesquera”.