SAL Y PIMIENTA | José L. Conde

El sector de la restauración entreabre las puertas de sus restaurantes | Foto: Sergio Méndez
El sector de la restauración entreabre las puertas de sus restaurantes | Foto: Sergio Méndez

El sector de la restauración entreabre sus puertas con muchas incógnitas

El Diccionario de la Real Academia Española define la palabra entreabrir como “abrir un poco o a medias una puerta, ventana postigo, etc”. Y esto es precisamente lo que hace estos días el sector de la restauración: entreabrir las puertas de sus restaurantes. Porque para abrir, lo que se dice abrir, todavía queda mucho tiempo y no solo por las medidas restrictivas de aforo prescritas en el estado de alarma, sino por la incertidumbre de un rebrote, de ver reducidas las cajas diarias, de tener que reducir personal, de cumplir con las exigencias de los Erte aprobados por el Gobierno, de planificar un menú para que sea disfrutado en casa e, incluso, porque si bien es verdad que ahora la población se ha echado a la calle a recuperar el tiempo perdido no se sabe cuánto durará este ímpetu.

 

Bao-buns de langostinos enchiplotado de El Gato Negro, que mantiene su oferta take away | Foto: José L. Conde
Bao-buns de langostinos enchiplotado de El Gato Negro, que mantiene su oferta take away | Foto: José L. Conde

La desescalada de los restaurantes: take away, delivery y atención en sala

Puestos en contacto con chefs y propietarios de la restauración, es unánime la opinión de que hay que luchar contra esta crisis, pero no todos coinciden en la manera de desescalar. Ahora que se puede abrir ya los comedores al 40%, algunos han decidido volver a acoger a los clientes, mientras que otros apuestan por las fórmulas del take away (recoger la comida en el propio restaurante) o el delivery (recibir en el domicilio los platos). O compaginar la sala con platos para que los disfruten en las casas. ¡Hay de todo en la viña del señor! En el área metropolitana de Tenerife hay variedad de oferta, incluso aquellos que todavía mantendrán cerradas sus puertas hasta ver como el oxímoron de la nueva normalidad los hace ver la luz al final del túnel.

 

Los chefs protestan ante el Congreso de los Diputados
Los chefs protestan ante el Congreso de los Diputados

Los chefs protestan ante el Congreso de los Diputados

Tal es la situación de incertidumbre que unos 200 chefs, algunos de ellos con estrella Michelin, se concentraron esta semana a las puertas del Congreso para reivindicar la importancia de la hostelería en la economía española y exigir al Gobierno responsabilidad, mayor diálogo con los profesionales a la hora de regular cuestiones que les afectan y medidas económicas para salvar al sector y facilitar la reapertura de sus negocios. Tras la protesta los chefs dejaron sus chaquetillas dobladas en el exterior de la Cámara Baja.

 

Comedor del restaurante Nielsen | Foto: José L. Conde
Comedor del restaurante Nielsen | Foto: José L. Conde

Ya se puede ir a los comedores de los restaurantes

Los restaurantes de la capital tinerfeña ya están listos y adaptados para poner sus comedores interiores a disposición de los clientes tras un periodo de adaptación para mantener las distancias y de higienización. Este puente de final de mayo, que coincide con el Día de Canarias, ya se puede volver a disfrutar de algunos de ellos como son Nielsen de Danny Nielsen; Solana de Nacho Solana; El Aguarde de Javier González-Haba; Etéreo de Pedro Nel Restrepo; Cheese & Wine, de Chema Vicente, y La Chahi de Javier Rodríguez. También La Recova ha abiertos sus puestos ubicados en la pescadería.

 

LA GUINDILLA

Croquetas de queso de El Taller de Seve Díaz, que ofrece un servicio take away a sus clientes | Foto: José L. Conde
Croquetas de queso de El Taller de Seve Díaz, que ofrece un servicio take away a sus clientes | Foto: José L. Conde

¿El delivery vino para quedarse?

¿El delivery vino para quedarse o cuando abran los restaurantes desaparecerá? Esta es la gran pregunta que se hacen los chef y propietarios de establecimientos gastronómicos. En estos días muchos locales han aprovechado para ofertar la comida a domicilio con la finalidad de sacar un dinero puesto que con Erte o sin él hay que seguir pagando facturas. Y los cierto es que a algunos les ha ido bien. Pero cuando abran sus restaurantes tendrán que repensar esta fórmula para hacerla más atractiva y de calidad y, sobre todo, si en el mismo espacio podrán desarrollarla. | José L. Conde