Las papas de Tenerife, la miel, el queso de granja, la carne fresca de conejo y el gofio son otros productos que cuentan con este reconocimiento
El Cabildo ha presentado hoy las primeras cebollas tradicionales de Tenerife avaladas con la marca de garantía Tenerife Rural, que se unen así la de otros productos como la miel, el queso de granja, la carne fresca de conejo, el gofio tradicional o las papas de Tenerife.
El consejero insular de Agricultura, Ganadería y Pesca en funciones, Jesús Morales, considera esta iniciativa como “un ejemplo” de la política que quiere impulsar el Cabildo en relación con las variedades locales que se producen en Tenerife. “Tenemos que diferenciarnos para poder competir con otros productos que vienen de fuera y por esta razón vamos a impulsar no solo la conservación de estas variedades únicas en el mundo sino que también queremos valorizarlas para impulsar su comercialización”.
La ingeniera agrónoma Catalina Tascón, experta en el cultivo, ha explicado que “se acogen a esta marca las cebollas producidas en Tenerife de las variedades Guayonje, Los Carrizales (alto y bajo), Masca y San Juan de La Rambla que el consumidor podrá adquirir con este sello de garantía y que pueden competir perfectamente con las variedades comerciales ya que poseen una interesante calidad organoléptica”.
Por su parte, el jefe del Servicio Técnico del Área de Agricultura del Cabildo, Domingo Ríos, ha expresado que el objetivo de la marca Tenerife Rural es “garantizar que estos productos locales cuentan unos estándares de calidad óptimos para su comercialización y una seña de identidad que los hace fácilmente reconocibles por el consumidor”.
Esta marca forma parte del conjunto de actuaciones llevadas a cabo desde la Corporación insular para la valorización de los productos agroalimentarios así como para la defensa de la biodiversidad agrícola, ganadera y desarrollo rural. Se establece como un régimen voluntario que permite a los productores o transformadores el campo tinerfeño dar a conocer la calidad diferenciada de sus productos y ofrece a los consumidores la garantía de las características específicas tradicionales avaladas mediante los controles adecuados.
La superficie cultivada en Tenerife ronda actualmente las 120 hectáreas, que producen unas 3.000 toneladas de cebollas, lo que supone un autoabastecimiento inferior al 35 por ciento. Mayoritariamente se producen variedades comerciales y una pequeña parte de locales o tradicionales y, aunque ya no se exportan, sí existe un pequeño comercio entre las islas.
La cebolla, originaria de Asia central, debió introducirse en Canarias después de la Conquista ya que no se han encontrado referencias de la época prehispánica. Su cultivo experimentó un gran auge en Tenerife entre finales del siglo XIX y mediados del siglo XX debido a la producción de semillas para su exportación a América de las variedades Bermuda (blanca, amarilla y roja) y Cristal Wax.
Actualmente se siguen cultivando en Tenerife de modo similar que en siglos anteriores, sobre todo las variedades tradicionales. Debido a las condiciones ambientales, la Isla puede producir cebollas desde los primeros meses del año hasta finales de verano aunque cada variedad tiene una época óptima de cultivo y conocerla es indispensable para rentabilizar la inversión.