Bodegas Monje apuesta por la DOP Canarias con Dragoblanco y Hollera

Bodegas Monje ha embotellado dos de sus vinos, el Dragoblanco  y el Hollera, bajo la nueva Denominación de Origen Protegida Las Islas Canarias debido a que esta marca “es muy fuerte y a la mayoría del público le interesa que en estos momentos garanticemos que el producto sea canario y de calidad”.

Según Felipe Monje, se trata del Dragoblanco 2013, elaborado con uva listán blanco al 100%, muy divertido con aromas afrutados que recuerdan a la pera verde y la manzana, ligero en boca y estupendo equilibrio entre el azúcar y la acidez. Es ideal para aperitivos, primeros platos, pescados, mariscos y pizzas. El otro vino, el Hollera Monje 2013, de maceración carbónica con la varietal listán negro, es muy aromático e informal con notas de violetas y recuerdos a golosinas con fondo de pimienta negra, de cuerpo medio, fácil de beber para el copeteo, entrantes, pastas, verduras y carnes ligeras.  Es apropiado para el público joven.

El bodeguero ha señalado a este periódico que “ha optado por esta nueva DOP Las Islas Canarias porque entiendo que el éxito, que no hemos conseguido todavía en este sector vinícola, pasa por la unidad y el sentido común de un proyecto que camine hacia un mismo fin”. Dice que la marca Las Islas Canarias es “muy fuerte y a la mayoría del público le interesa en estos momentos que le garanticemos que el vino sea canario y de calidad; creo que el detalle del localismo pasa a un segundo plano”.

Por otra parte -señala a este periódico-,  “esta nueva DOP nos permite ampliar la gama de vinos, mejorarlos y la posibilidad de acceder a todos los rincones de las islas en busca de nuevos estilos de elaboración y variedades de uvas.

A nivel estructural nos permite ser mas competitivos y resolver en determinados momentos problemas de producción”. Destaca también como muy importante que ahora el viticultor puede vender su uva en toda Canarias.