La restauradora y propietaria del Restaurante Casa Mi Suegra, Bárbara González Gil, crea una nueva línea de confitería
Un homenaje gastronómico al pasado aborigen de las Islas. La restauradora y propietaria del Restaurante Casa Mi Suegra, Bárbara González Gil, acaba de lanzar al mercado una nueva y pionera línea de confitería donde los sabores canarios, el legado guanche y la naturaleza de las Islas son las auténticas protagonistas. Nueve bombones de nueve sabores típicos de las Islas y nueve formas tradicionales de Canarias, lo que los convierten en los bombones más canarios del mundo.
Cada bombón, cubierto de chocolate, tiene una forma de pintadera o grabado guanche, y en su interior un sabor tradicional de las Islas. Papaya-piña, papa negra con almendras, queso, vino y clavo, tomate, cebolla roja, mojo rojo (picante), mojo verde (cilantro) y gofio y plátano son los nueve sabores de los bombones creados por la restauradora del restaurante ubicado en Tegueste.
Este nuevo producto supone un salto de calidad de la gastronomía canaria, una apuesta decidida por los productos y sabores de las Islas, todo mezclado en una auténtica fusión de cultura, naturaleza y patrimonio guanche.
Los nueve tipos de bombones, con sus nueve formas del legado guanche, vienen arropados en otra de las novedades que lanza la restauradora teguestera, se trata su envoltorio denominado “canarina” (nombre también de la marca bajo la que se comercializarán estos productos), una flor típica canaria y con la que se quiere representar a todo el Archipiélago. Además, en el envoltorio de estos bombones vendrá una explicación de su composición en tres idiomas (ruso, inglés y alemán).
Un atractivo más de esta nueva línea de confitería que sale a la venta la próxima semana y a la que se une otra novedad presentada por la restauradora nacida en la Villa, una tara de chocolate con gofio frito.
Según reveló la creadora teguestera durante la presentación, esta idea surgió durante una charla a la que acudió de la Universidad de La Laguna, y donde se hablaba del Barranco Agua de Dios, ubicado en Tegueste y declarado Bien de Interés Cultural (BIC); una de las zonas más relevantes del pasado aborigen de Canarias. Fue en ese mismo instante donde visualizó lo que, meses después y tras muchos ensayos y pruebas, son los bombones más canarios que existen. A la presentación de esta nueva línea de confitería acudieron el alcalde de Tegueste, José Manuel Molina; junto a varios representantes del mundo empresarial y gastronómico de Tenerife.
Con este nuevo producto, lo que pretendemos es “dar a conocer aún más todo lo que puede dar de sí la gastronomía canaria, los productos de nuestra tierra; dar un salto de calidad y darlos a conocer con otro formato” aseguró Bárbara González Gil.
Este nuevo “pequeño gran embajador de Canarias” pretende ser, además, referencia para el desarrollo y promoción de Canarias a nivel internacional. “Una nueva línea de confitería selecta que evoca la fusión de todos los elementos que conforman la identidad de nuestra tierra, la fusión de cultura e historia, los matices de la gama de contrastes que representa Canarias y como no puede ser de otra forma, nuestro sabor más auténtico”, argumentó la restauradora y propietaria de Casa Mi Suegra.
Bárbara González Gil es la restauradora y propietaria de Casa Mi Suegra, un restaurante ubicado en una casona con más de un siglo de antigüedad, y ubicada en medio de una finca de viñedos del municipio de Tegueste, que fue en tiempos una panadería muy famosa que surtía de pan a toda la comarca.
Ahora, los platos de Bárbara González Gil componen una amplia carta donde las protagonistas son las recetas tradicionales canarias, y también la denominada “Nueva Cocina Creativa Canaria”. El restaurante dispone de tres comedores que representan el original estilo de una casa antigua canaria, con mobiliario acorde en sus salones y su característica cocina, lo que le aporta ese ambiente peculiar que le ha otorgado gran reconocimiento en esta parte de la Isla.