Maridar comida y cóctel

El chef Juan Carlos Clemente y el barman Eduardo Alonso diseñaron una experiencia gastronómica en el restaurante La Pérgola de El Mirador

¿Comer con cócteles? Al principio suena raro, pero una vez que se sucumbe a una cena de estas características es muy probable que se cambie de opinión. No en vano el grupo hotelero Iberostar lleva tres años con lo que ha denominado Food&Drink Gourmet Experiencie, que en esta ocasión se ha celebrado en el gran hotel El Mirador de Costa Adeje. Los protagonistas fueron el asesor gastronómico de los hoteles cinco estrellas del grupo para Canarias, y el reconocido barman tinerfeño Eduardo Alonso, cinco veces campeón de España y una del mundo, lo que se encargaron de elaborar y diseñar este singular menú.

El lugar escogido fue  la terraza de  restaurante La Pérgola donde el tándem Clemente y Alonso realizaron un showcooking que hizo las delicias de los asistentes a la velada. Ambos habían trabajado intenso para lograr maridar comida y coctelería, con la que sorprendieron agradablemente y divirtieron al público.

Un total de ocho cócteles para otros tantos platos fue el menú escogido: manzana verde y foie con gin tonic Beefeater 24; tomates cherry pasificados con pescado azul, con Cucumus Collins (pepino, el anisado Sambura, y tomate cherry); chutney de hinojo, tartar de atún y espuma de papa con Brambord (ginebra, limón y mora); pulpo asado con couscous de coliflor con Mint Jimi Hendricks (bourbon, ginebra, lima y yerbabuena);  pollo de corral con bogavante y salsa de naranja con Glen mango star (güisqui de malta, licor de naranja, lima y mango); carne de buey asado con aceite de carbón con French Martini (piña, vodka y licor de frambuesa); coco piña con Chicharono (piña, ron blanco, Amaretto y zumo de naranja) y cremoso de chocolate, menta y limón con chocolate mojito (licor de chocolate, ron, lima y yerbabuena) y por último, cremosos de chocolate, menta y limón con chocolate mojito (licor Mozart Oro, ron, soda y chocolate).

Aunque parezca increíble se puede disfrutar de este maridaje comida coctelería sin acabar “perjudicado” por los efectos del alcohol, eso sí, siempre y cuando se beba con moderación. Una experiencia sin duda aconsejable porque el hecho de comer implica también diversión, y grandes dosis las aportan las elaboraciones, algunas creaciones propias, del barman Alonso, un desconocido en su tierra que ha escalado importantes puestos en el mundo complejo de la mixología. | J.L.C.