Josep Roca: El nuestro es “un mundo mal alimentado” pese al auge de la cocina

 

Josep Roca | Foto: EFE
Josep Roca | Foto: EFE

“El Celler de Can Roca” ha decidido apostar por productos canarios e introducirlos en el laboratorio o “espacio de creatividad” con que cuenta el restaurante

El auge de la cocina de autor y su creciente presencia en los medios de comunicación no han evitado que el actual sea “un mundo mal alimentado” con platos precocinados y comida rápida que se imponen a los guisos tradicionales, defiende el chef y sumiller Josep Roca.

Este miembro del clan de hermanos que han logrado fama mundial con sus platos en “El Celler de Can Roca” ha planteado esta paradoja en una conferencia organizada en Las Palmas de Gran Canaria por los diarios “La Provincia” y “La Opinión de Tenerife”, aprovechando una visita que efectúa al archipiélago para conocer productos autóctonos que proyecta incorporar a la oferta del restaurante de su familia.

Referente internacional de la gastronomía, como prueba el hecho de que sus mesas están completamente reservadas ya hasta dentro de un año, octubre de 2019, “El Celler de Can Roca” sigue empeñado en mantener la creatividad en los fogones como una de sus señas de identidad más destacada.

Ha empezado hace meses a experimentar con recetas y productos típicos de la alimentación isleña en busca de nuevos guisos con los que sorprender a sus clientes, ha relatado su copropietario.

En Canarias “la materia prima es única”, ha asegurado el alabado cocinero, que, tras varios días recorriendo la región para conocer ingredientes y preparaciones susceptibles de incorporar a la carta de su establecimiento, ha subrayado la calidad de algunos productos, como el popular gofio, los también conocidos mojos o las numerosas variedades de quesos que se hacen a lo largo y ancho de su geografía.

Josep Roca con Antonio Morales y Mario Reyes, en el Tasting Room de Vinófilos celebrado en Gran Canaria
Josep Roca con Antonio Morales y Mario Reyes, en el Tasting Room de Vinófilos celebrado en Gran Canaria

Y ha citado, como ejemplos, el queso de media flor típico del norte de Gran Canaria, elaborado con cuajo vegetal en lugar del animal que es habitual, o los ahumados que se hacen en esa misma isla y otras como Fuerteventura, El Hierro o La Palma.

La calidad de esos alimentos es “realmente indiscutible”, ha sentenciado Josep Roca, que ha afirmado que ese nivel de distintos productos canarios es posible por las buenas materias primas que se emplean en ellos, pero también porque “el talento existe” entre quienes trabajan en el sector en el archipiélago.

Esas razones justifican, según ha explicado, que en “El Celler de Can Roca” hayan decidido apostar por ellos e introducirlos en el laboratorio o “espacio de creatividad” con que cuenta ese restaurante, que tiene a tres personas asignadas permanentemente a inventar y probar nuevas elaboraciones con que sorprender a los comensales.

La iniciativa se enmarca en una filosofía de empresa que se basa en premisas como que “para crecer hay que soñar, hay que investigar”, ha recalcado.

Pese a todo, Josep Roca se ha declarado partidario de “huir del éxito” y de no abandonar nunca “la idea del aprendizaje” como una necesidad permanente para no perder posiciones en un restaurante que ha sido elegido en dos ocasiones como “el mejor del mundo”.

Ya que “esa nueva realidad de reconocimiento y posicionamiento en la sociedad” de los profesionales de la cocina que se ha dado en los últimos años “puede ser muy negativa” para los chefs si les conduce a la autocomplacencia, ha argumentado.

Desde esos planteamientos, Josep Roca ha dicho que “hacer de nuestra pasión nuestra profesión” es el máximo principio que inspira su trabajo y el de sus hermanos y colaboradores.

“Esa es, probablemente, la mejor receta que podemos dar” a quienes deseen emular al clan Roca, ha apostillado. | EFEAGRO